domingo, 27 de junio de 2010

La vía ferrata de Foradada del Toscar en imágenes

Bonita forma de pasar una mañana de domingo después de la ascensión al Néovielle del día anterior, siempre que se tenga el material adecuado y poco vértigo. Algo más dura y larga que la cercana vía del barranco de Sorrosal en Broto, pero sin pasos especialmente dificultosos en este tipo de recorridos...

Tenemos que conducir unos 17 Km. desde Aínsa, en dirección a Campo...

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Poco antes de llegar al pueblo de Foradada del Toscar, en esta larga recta con Peña Montañesa a nuestra espalda, hay un brusco desvío hacia una pista a la izquierda (cartel de madera: 'ferrata'). Podemos aparcar ahí mismo o intentar subir un poco más con el coche...


Nosotros haremos toda la aproximación andando (unos 15'), con la base de la pared al fondo...


Esquema de la vía en el punto de salida...


Tras un aéreo espolón inicial, se introduce en esta cerrada canal...


Que podemos ver también desde abajo...


Después se abre de nuevo hacia una pared vertical y va tendiendo a la izquierda...


Tras el puente de traviesa (tronco), encontramos enseguida este corto puente de cable, con un solitario alambre para los pies, aunque no impresiona demasiado por el poco patio de debajo...


Tras él, hemos subido ya al estrecho torreón de la primera cima, y aquí estamos bajando de ella y cruzando una pequeña brecha...


En dirección a la travesía horizontal de un paredón...


La pista de acceso se ve allá abajo...


Continua el flanqueo, con la protección psicológica de algunos arbustos...


Hasta llegar al puente colgante de traviesas metálicas. Al principio le faltan algunas, por lo que hay que pasar sobre los cables laterales. Y la cuarta por la cola está doblada...


El mismo puente visto de lejos desde la senda de bajada, mientras lo cruzaba otro grupo...


A partir de aquí, la vía a la segunda cima es menos vertical y sin pasos destacables...




El descenso esta equipado en varios puntos con maromas, para salvar escalones en un empinado sendero que debe ponerse difícil con lluvia, y que nos dejará en el mismo punto de partida...



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Ascensión al Néouvielle, reseña breve

NÉOUVIELLE O NEUVIELH (3091 m): Pico francés perteneciente al núcleo de cumbres del Pic Long, único grupo de tresmiles pirenaicos situado íntegramente en Francia, no tan alto como el propio Pic Long, aunque sí mucho más frecuentado por su ascensión más corta y sencilla. Se localiza en la comuna de Saint-Lary-Soulan, dentro del departamento de Hautes-Pyrénées, región de Midi-Pyrénées, al sur del Midi de Bigorre y del famoso Col du Tourmalet. Primera ascensión documentada por Vincent de Chausenque, junto con el guía de Barèges Bastien Teinturier, el 10 de julio de 1847.

ACCESO: Desde España por el túnel de Bielsa, después de pasar Aragnouet, tomar a la entrada en el pueblo de Fabian un desvío señalizado a la izquierda hacia la Reserva Natural de Néouvielle. Pista de montaña estrecha bien asfaltada. Al llegar al Lac de Orédon, tomar un desvío a la derecha que desciende hacia el lago y llega a un parking en la cabecera del lago, cerrado por una barrera. Tomar el ticket para pasar la barrera pero continuar en coche dejando de lado el parking, por una pista también asfaltada que llega a otra zona de aparcamiento permitido, entre los Lacs d‘Aubert y d’Aumar.


ASCENSIÓN: Pasar junto a unas casetas hacia la presa del Lac d’Aubert (2.150 m), que se cruza por encima o por un sendero paralelo a ella, para ascender al otro lado por terreno pedregoso y de matorral hacia la vaguada que forman las crestas des Laquettes, a la izquierda, y de Barris, a la derecha. Tras ganar algo de altura, ir tendiendo a la derecha para abandonar esta vaguada y cruzar la cresta de Barris por un hombro o collado en su parte inferior, por encima de los escarpes que caen hacia el lago (2.435 m). Al otro lado, descender ligeramente por terreno de bloques, nevados a principios de temporada, para alejarse un poco de la cresta e iniciar una larga subida, con mucha nieve hasta bien entrado el verano, en dirección a un collado bien definido que se abre en la divisoria del fondo (brecha de Chausenque). Antes de alcanzarlo, a la altura de un característico islote rocoso que viene bien para un descanso, girar a la izquierda en dirección a la cima, visible ya en el extremo izquierdo del cordal. Tras un nuevo giro a la izquierda para salvar una barrera rocosa, se supera la rampa final de nieve y un flanqueo horizontal con menor pendiente que conduce a una chimenea corta y fácil, aunque peligrosa con nieve helada o endurecida, que da acceso a la cumbre.





















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